Los chaneques, esos personajes de la cultura actual y del folclor mexicano, su permanencia en la memoria de los habitantes de Veracruz, Chiapas y Tabasco sobrevive por los relatos y cuentos de abuelos a nietos, pero, pese a esas historias, ya sea de terror o de aventura, ¿sabemos de donde provienen? pues eso veremos a continuación.
Su importancia para los totonacos y pueblos adyacentes.
Su origen se remonta a la época prehispánica, en la región del totonacapan, olmeca y maya, aunque la palabra "chaneque" proviene de idioma náhuatl, traduciéndose como "los seres que habitan en los lugares peligrosos". Se tienen distintos conceptos sobre estos seres, uno de ellos dice que que son los guardianes del bosque, la selva, los animales y los manantiales, sin embargo, existen dos tipos de chaneques, el primer grupo son los "buenos", aquellos que viven en zonas habitadas, en campos de cultivo y parcelas, cuyo único propósito es el de jugar sin hacer daño; el segundo grupo se compone por los "malos", habitan en los cerros y cuevas, cuyo fin es secuestrar a infantes para hacerlos parte de la servidumbre.
Protección.
Pese a que se les conoce por ser simplemente juguetones, si se es grosero con ellos, pueden lanzar maleficios y hechizos que, posiblemente, un curandero dirá que se debe de ir a ofrendar algo en señal de perdón. En los niños pequeños es distinto, ellos suelen ser atraídos por ellos para que huyan al bosque, es por eso que existen distintas formas de protegerlos, algunas son voltear la camisa y usarla al revés, vendarles los ojos o cubrirlos. En caso de estar en el hogar, basta con una fruta o dulce para que estos estén tranquilos.
El agradecimiento.
Cuando se encuentra a uno de estos seres mientras se está en el bosque, se debe ser amables con ellos y decirle "gracias", ya que , a parte de proteger al bosque en el que nos encontramos, nos pueden proteger a nosotros.
Anónimo. (2019). Chaneques, los traviesos duendes mexicanos. Abril 15, 2020, de México desconocido Sitio web: https://www.mexicodesconocido.com.mx/chaneques-duendes-mexicanos.html
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